El título del libro es Velázquez. El fluir expresivo de su pintura, y contiene 15 estudios sobre obras -algunas inéditas- del sevillano Diego Velázquez.
Algunos de estos estudios ya fueron publicados antaño por la autora, pero se ofrecen ahora revisados y ampliados por ella misma, y con un aparato gráfico mucho más preciso y consistente. Otros, en cambio, son completamente inéditos y fueron finalizados días antes de su triste e inesperado fallecimiento el 8 de diciembre de 2020. Los quince estudios ilustran muy bien el singular y penetrante modo perceptivo y analítico que exhibe su autora ante la pintura de unos de los mayores genios de la historia de la pintura universal. El Centre d’Art d’Època Moderna (CAEM) de la Universidad de Lleida ha preparado con pulcritud la edición de este libro, que ofrece como un signo inequívoco de homenaje y gratitud a Carmen Garrido, quien, en los últimos años de su vida, asumió la codirección científica del CAEM y colaboró eficazmente con todos y cada uno de los investigadores de este centro de la Universidad de Lleida.
Destaca el descubrimiento de una versión inédita del Principe Felipe Próspero, óleo sobre lienzo, 144’2 x 104’1 cm, pintado hacia 1659. El profesor D. Diego Angulo vio esta espléndida obra muy al principio de los años 70 del siglo XX, completamente travestida de Carlos II, y ya le pareció intuir que la mayor parte de los estilemas de Diego Velázquez estaban un poco camuflados por alguien, presumiblemente Juan Bautista Martínez del Mazo, quien a los pocos años de fallecer Felipe el 1 de noviembre de 1661 lo convirtió en Carlos II. Afortunadamente la obra ha sido pulcra y muy profesionalmente intervenida por Ana Villalba y Salut Díez, del Departamento de Restauración del CAEM, y ha recuperado su primigenio esplendor. Permite reconocer, por ejemplo, a una de las cabecitas infantiles más primorosas de la historia de la pintura occidental. Recuperar dicha efigie, preciosa, idéntica a la versión del museo de Viena, fue el último deseo de la Dra. Garrido, lo que en verdad se ha conseguido a título póstumo. Ciertamente, todo lo recuperado en este sorprendente lienzo ha resultado ser como un inesperado y bienvenido milagro para la historia de la pintura universal.
Otros concienzudos estudios, como, por ejemplo, los dedicados al Almuerzo, Pichones de Paloma, Retrato de caballero, San Francisco en oración, Retrato de un clérigo, El inquisidor Don Sebastián García de Huerta, Don Manuel de Fonseca y Zúñiga, VI Conde de Monterrey, o un precioso San Antonio Abad, completan este importante libro póstumo de Carmen Garrido.